Es curiosa la traducción que le han dado en España a esta película. Mientras que su título original es Aftermath (secuela/resultado), en España han decidido decantarse por llamarla Una historia de venganza para resaltar así una parte de la historia que aunque desvela la trama, no representa lo que de verdad parece querer contar la cinta. Con ello, da la impresión de que en España están más preocupados por atraer a los espectadores al cine más que a ser fieles a su título original. Y es que la intención de esa traducción parece ser la de hacer que muchos espectadores, que conocen la trayectoria fílmica de Schwarzenegger, se decanten a verla pensando que es una película en la que la venganza es su principal tema y no un drama cuyo mensaje es más primordial que el entretenimiento que crea.

Una historia de venganza (Elliott Lester, 2017) está basada en la verdadera historia de un padre de familia que pierde a su mujer y a su hijo en un accidente de avión causado por el error humano de un controlador aéreo. El largometraje relata las vidas de ambos hombres tras el fatídico accidente y muestra cómo un momento de nuestras vidas puede arruinar el resto sin apenas darnos cuenta. Con un ritmo bastante monótono y una lentitud palpable desde el comienzo, las historias entrelazadas de los dos hombres tras el accidente nos hacen comprender la depresión, tristeza y soledad que sienten tras lo sucedido. El logro del largometraje es el de comprender toda la cantidad de factores que hacen que esta historia termine siendo la que ha sido en realidad. Puede que algunos se sientan decepcionados al verla por tener una idea equivocada de lo que era antes de comenzarla, pero lo cierto es que es difícil que no nos deje pensativos tras finalizarla, y es que nos demuestra que a veces la vida puede ser realmente cruel.