La historia que comenzó James Franco en su laboratorio experimentando con primates en El origen del planeta de los simios (Rise of the Planet of the Apes, Rupert Wyatt, 2011) cuando buscaba una cura para el alzheimer que sufría su padre, y en la que se inició una guerra entre humanos y simios que pudimos ver en El amanecer del planeta de los simios (Dawn of the Planet of the Apes, Matt Reeves, 2014), continúa en esta tercera parte en la que, a pesar de toda la guerra que recalca su título o nos muestra su tráiler, La guerra del planeta de los simios (War for the Planet of the Apes, Matt Reeves, 2017) es un extraordinario thriller en el que la moral y la venganza son constantemente cuestionadas dejando la batalla en un segundo plano, y en el que el personaje de César—magníficamente interpretado por el actor Andy Serkis— se convierte en uno de los mejores héroes de todos los tiempos.

Matt Reeves repite al mando de la dirección como ya lo hizo con El amanecer del planeta de los simios, demostrando así que las terceras partes pueden mejorar su segunda y primera parte. La historia vuelve a ser una analogía del mundo real mostrando una guerra que comenzamos y creamos los humanos, y en la que pretendemos con ella explicar una teoría tan ilógica como es una matanza entre nuestra misma especie —o en este caso también contra aquello que es desconocido para nosotros y nos asusta—, en la que se pelea por unos intereses individuales y egoístas que no parecen avergonzar a nuestra especie.

La influencia de Reeves sobre el cine bélico y de aventuras, y las constantes referencias a algunas de esas películas como el casco que imita al de Stanley Kubrick en La chaqueta metálica (Full Metal Jacket, 1987) o la pared que parodia la cinta de F. Ford Coppola, Apocalypse Now (1979) son algunas de las características con las que el director finaliza una guerra en la que la amistad, el respeto y el trabajo en equipo son algunos de los conceptos que se han querido resaltar. Con una puesta en escena mucho más sorprendente en esta cinta que en sus anteriores, y con un juego de silencios y música ambiente que realza cada momento del largometraje, La guerra del planeta de los simios cierra una trilogía dejándonos un mensaje con el que abrir los ojos, y tres películas con las que disfrutar del séptimo arte.