La directora de cine Paula Ortiz se apodera de los versos de Federico García Lorca cogiendo el poema del escritor ‘Bodas de sangre’ y haciéndolo completamente suyo. La manera tan personal con la que la directora representa esta tragedia en el largometraje La Novia (2015), retratando los pequeños detalles de la obra y haciendo que una historia tan clásica y tradicional tenga un encanto particular en pleno siglo XXI es lo que hace tan especial esta cinta. El relato narra la historia de amor de un trío de amigos que el destino termina llevando por caminos diferentes debido a la riña y a los asesinatos que suceden entre dos familias.

Recordando a la mítica historia de Shakespeare, el amor y la muerte son representados en esta obra gracias a una serie de escenas en las que los llantos y las alegrías se van sucediendo y dan vida a la prosa del escritor de la generación del 27. La puesta en escena retratada con la exposición de los colores juegan un papel fundamental, la inmejorable fotografía que enmarca esta historia en medio de un desierto árido y cobrizo, y las soberbias interpretaciones de Inma Cuesta y Luisa Gavasa que encarnan a la novia y a la madre respectivamente son algunos de los ingredientes por los que merece ser visto este largometraje. Una obra llena de sentimientos que respeta los actos de Lorca y con la que la poesía se convierte en el guión cinematográfico que Paula Ortiz ha plasmado en el séptimo arte.