Phil Stutz es el nombre del terapeuta del actor Jonah Hill. Jonah dirige y protagoniza este documental entrevistando a la persona que le ha proporcionado las herramientas, enseñanza y conocimiento para conseguir llevar una vida mejor. Stutz (2022) es un documental con el que Jonah Hill da a conocer al mundo a su terapeuta y las pautas que este le proporciona y al mismo tiempo, es también un homenaje que el actor hace a Phil por su trabajo y por la persona que es. Mediante el diálogo que se forma entre ambos, el espectador conocerá mejor a sus dos protagonistas. Un entrevistador que a su vez es entrevistado en ciertos momentos en los que cuenta entre otras cosas sus problemas con la obesidad que arrastra desde la adolescencia y un entrevistado que, a sus 74 años convive con la enfermedad de párkinson, aunque reconoce que le queda mucha vida pendiente de disfrutar todavía.

Phil Stutz explica a la cámara las herramientas para llevar una vida más saludable con uno mismo. Términos como la fuerza vital y esa pirámide de tres, la parte X, los tres aspectos de la realidad que nadie puede evitar, la sombra, el laberinto, el amor activo, el flujo de gratitud o el procesamiento de la pérdida son algunos de los puntos que el terapeuta explica con la ayuda del paciente poniendo ejemplos prácticos al espectador. La honestidad del diálogo y la forma de abrirse personalmente ante las cámaras les lleva a conocerse mejor entre ellos y ahondar en todo tipo de temas, tocando así sus miedos e inquietudes que al decirlos en alto les ayuda a gestionarlos y enfrentarse a estos de otra manera.

De alguna forma resulta conmovedor ser testigo de estos encuentros personales que también nos hacen sentirnos incómodos en ciertos momentos como espectadores por la dureza de los temas que tratan. A veces la calidad del tema en cuestión gana fuerza al formato en sí o a su composición y ese puede ser el caso de este documental. Las herramientas de las que hablan y las reflexiones que ambos realizan en este reportaje son más relevantes que la forma de relatarlos tan particular que hace que su realización no sea determinante y tenga muchos detalles que hubieran sido mejor cuidar o cambiar. Y es que la sensación final tras visionar Stutz es la de agradecimiento a ambos, por un lado a Jonah Hill por dar a conocer a Phil Stutz y por otro lado, al terapeuta por mostrar su metodología y conocimientos.