Sin conocer detalladamente la carrera profesional y personal de la artista Anna Mae Bullock —conocida mundialmente por su nombre artístico Tina Turner—, pero sí disfrutando de su repertorio musical con canciones como ‘Proud Mary’, ‘Private Dancer’ o ‘Goldeneye’ desde niña gracias a los buenos gustos musicales de mi padre, debo decir que el documental Tina (Dan Lindsay & TJ Martin, 2021) me ha sorprendido gratamente y no solo me ha ayudado a conocer más a la persona detrás del nombre artístico sino que también me ha parecido toda una heroína que gracias a sus dotes musicales, ha sabido sobrellevar una vida que en su mayoría ha sido bastante trágica.

El documental comienza con una breve presentación que resume lo que veremos más adelante detenidamente, la cantante en el escenario dándolo todo en uno de los conciertos de sus últimas décadas y a continuación, ella confesando en una entrevista en Zurich en 2019 que no ha tenido una buena vida porque los malos momentos pesan más que los buenos y recordando una entrevista de 1981 para la revista People en la que hablaba de su pasado con Ike y los abusos que sufrió. Un breve resumen para introducirnos en un documental que está dividido en cinco partes: Ike & Tina, su familia, su vuelta, la historia y el amor. Bien organizado y relatado, Tina nos ayuda a conocer a la persona que hay detrás del nombre y empatizar con la mujer que se hizo famosa por su característica voz, su movimiento de piernas y su puesta en escena sobre el escenario.

Con los testimonios de la actriz Angela Bassett que hizo de Tina en la película, el periodista y crítico de cine Kurt Loder, la presentadora Oprah Winfrey o la propia Tina Turner entre otros, el documental Tina hace un repaso por la carrera profesional de la cantante y nos invita a conocer la historia de una mujer perseverante y apasionada de su trabajo que empezó muy joven en el mundo de la música, tuvo experiencias personales duras desde su infancia hasta los dieciséis años de matrimonio con su productor, manager y marido Ike Turner pero siguió adelante sacando una carrera de solista con la que consiguió su sueño de llenar estadios como el propio Mick Jagger y llegar a ser llamada la reina del rock.