Entre viaje y viaje para dejar a los hijos en el colegio, ir a terapia de pareja o simplemente tomar una café con otras madres del colegio, la serie Big Little Lies (David E. Kelley, 2017) nos enseña las impresionantes vistas que recorren en coche estas mujeres en la ciudad de Monterey en California y esos paisajes se hacen más maravillosos cuando una banda sonora como la de esta serie suena de fondo. Tan sólo tres episodios en los que el drama protagonista de la vida de estas tres mujeres tapa la que parece ser la trama principal con un asesinato desconocido y los posteriores chismorreos de toda una comunidad que sospecha de todos y no duda en criticar a sus propios vecinos. Tan sólo tres episodios y está claro que no solo la vida de los personajes que interpretan estas actrices tan aclamadas de Hollywood es lo que nos puede llegar a enganchar a la hora de ver Big Little Lies, y es que su variada banda sonora con todo tipo de ritmos y sonidos construyen secuencias memorables. Desde PJ Harvey a Agnes Obel, Otis Redding a Fleetwood Mac o el propio Neil Young. Y todavía quedan cuatro episodios más de esta miniserie de televisión.