Desde su estreno en el año 2013, Peaky Blinders (Steven Knight) se ha convertido en una serie esperada por todos aquellos que admiramos la forma en la que se relata la vida de estos gánsgters de Birmingham con una fascinante fotografía que envuelve todo el relato y en la que la paleta de colores es fundamental para crear unas imágenes extraordinarias, a las que acompañan una banda sonora que encaja a la perfección con las secuencias que se narran mezclando todo tipo de música en su mayoría británica con artistas como PJ Harvey, Artic Monkeys, Laura Marling, Radiohead o Nick Cave and the Bad Seeds.

Tras cinco temporadas que han sabido dejar el pabellón alto y no decaer a pesar de la presión que ha ido generando la fama de la serie, Peaky Blinders se estrena ahora en Netflix con la sexta y última temporada tras su estreno a principios de año en Reino Unido en la cadena de televisión BBC. Con el reciente fallecimiento de la actriz Helen McCrory que interpretaba el personaje de la tía Polly y que era la mujer al mando para llevar los negocios cuando no estaba Thomas y funcionaba como cerebro, guía y parte fundamental de la historia gestionando principalmente a los hermanos Shelby, la serie se encarga de seguir su legado haciendo que su personaje siga siendo necesario y recordado constantemente en este cierre de temporada.

El protagonista sigue siendo Tommy Shelby en un papel que el actor Cillian Murphy lleva ya demasiado metido en la sangre y sus hermanos quedan relegados a un segundo plano en este final. Los negocios de Tommy son el eje central y la sed de venganza sigue siendo el motor para los constantes asesinatos que se producen. Vuelven a aparecer secundarios relevantes como la líder del IRA Laura Mckee, el ahora retirado Alfie Solomons o el fascista Oswald Mosley. Aunque la esencia de la serie sigue ahí, se echa de menos su sello más característico en esta temporada. Su banda sonora es más escueta y pobre —destacan ahora Anna Calvi, IDLES, Gilla Band o The Smile—, sus personajes están más rotos que nunca y han perdido mucho fuelle, la fotografía podría haber vuelto a mostrar secuencias grandiosas y aunque Tommy es el nexo de unión de los personajes, si se hubiera dejado ciertos secundarios a un lado y se hubiera priorizado otros como Ada Shelby, Esme Shelby o incluso Lizzie Stark, se podría haber remontado su temporada más floja.