Gracias al Festival de Cine Solidario de Guadalajara (FESCIGU 2021) hemos podido disfrutar de algunos de los cortometrajes que se ofrecieron para su visionado y recomendamos especialmente dos de ellos estrenados este mismo año 2021. Por un lado, Votamos del director Santiago Requejo y por otro, Retales del director Giovanni Maccelli. Estos dos cortometrajes presentan temáticas opuestas pero ambos saben atrapar al espectador y nos dejan con unas cuantas dudas morales que nos harán reflexionar sobre los asuntos que plantean.

Votamos nos lleva a una junta de vecinos en la que los propietarios se han reunido para decidir si cambian el ascensor del edificio en el que viven y que les llevará a un debate inesperado en el que el espectador será testigo omnisciente y reflexionará sobre la discusión desde un lugar externo a ellos pero sintiéndose muy presente dentro de la polémica. Con un reparto muy conocido con actores como Charo Reina, Raúl Fernández, Neus Sanz o Miriam Díaz Aroca y con tan sólo catorce minutos de duración, este cortometraje de Santiago Requejo rodado dentro de un plano secuencia que enseguida nos hace entrar dentro de la historia y con un guión brillantemente escrito es una mirada hacia la intolerancia y egoísmo del ser humano cuando esos prejuicios y ese juicio moral que hacemos a los otros sin apenas información o conocimiento se ponen sobre la mesa cuando llega un problema que nos afecta a nosotros mismos.

Retales nos hace viajar al Madrid de los años 40 a una noche en la que dos mujeres se dirigen juntas al cementerio y escuchan con sigilo lo que sucede detrás de una tapia. A una de ellas se le nota más nerviosa mientras que la segunda muestra más calma y experiencia pero ambas llevan consigo sus propias tijeras que utilizarán esa noche. Este cortometraje del cineasta italiano Giovanni Maccelli es sin duda un fabuloso homenaje a las víctimas del franquismo y concretamente como dice el propio cortometraje, a las víctimas invisibles del franquismo. Una conmovedora historia que en tan sólo diez minutos y sin apenas diálogos consigue que el espectador sienta, recuerde y no olvide lo que pasó durante esos años en España, y que todavía sigue abierto y sin respuesta para muchas personas en la actualidad.