Estamos avisados desde antes del comienzo de la película, “esto es más real de lo que puede parecer”. Pequeñas cartas indiscretas (Wicked Little Letters, Thea Sharrock, 2023) se inspira en la historia real que tuvo lugar en la ciudad británica de Littlehampton en los años 20, cuando una vecina comenzó a recibir unas cartas anónimas con contenido obsceno y faltón sobre su persona. Desde el inicio se sospecha que las cartas las escribe una nueva vecina irlandesa que demuestra tener un carácter más liberal y abierto que su vecina de carácter más conservador, y rápidamente se le castiga pese a la falta de pruebas que justifiquen su culpabilidad. La proactividad de una policía que sufre los comentarios sexistas de sus compañeros, quienes la tratan de inferior por ser mujer, le llevará a buscar pruebas que ayuden a confirmar quién envía esas cartas.

El largometraje funciona mezclando comedia y drama así como muchos toques de realidad de por medio que ayudan a denunciar los comportamientos machistas caducos que tanto han abundado en la sociedad de hace años, y que todavía somos capaces de advertir a nuestro alrededor. A través del humor que domina la narración durante todo el filme, haciendo que los momentos más dramáticos sean mucho más digeribles, la crítica recae en el machismo y represión que hombres y mujeres llevan implícitos en sus comportamientos debido a los ambientes en los que se mueven o a su propia educación, y evidencian una carencia de empatía y progreso en ciertos grupos sociales.

Los distintos temperamentos, formas de ser y entorno social y de clase de las mujeres protagonistas son los que terminarán dejando una moraleja muy aplicable a la actualidad, en un mundo en el que la imagen y la fachada parece querer valer más que la persona que eres. Pequeñas cartas indiscretas es un entretenido filme británico con tres excelentes actrices protagonistas —Olivia Colman, Jessie Buckley y Anjana Vasan—, en unos papeles llenos de matices que gracias a su baño en una comedia a veces bastante negra y, por qué no decir, también obscena, consigue que se vea mejor este drama lleno de críticas hacia una sociedad que era evidente que existía en los años 20, pero que lamentablemente, sigue teniendo resquicios en la población actual cuando han pasado 100 años desde que tuvo lugar este suceso.