Netflix presenta la primera temporada de la serie The Umbrella Academy (Jeremy Slater, 2019), diez episodios que están basados en el cómic del mismo nombre que comienza con un fenómeno único en el que unas pocas mujeres dan a luz tras quedarse embarazadas repentinamente el mismo día del parto. Siete de esos niños son adoptados por un multimillonario y volverán a reunirse en su época adulta tras la muerte repentina de su padre para investigar qué le pudo pasar al patriarca de la familia.

Una buena presentación de los siete hermanos que se realiza en el primer episodio de la serie, en la que el carisma y las distintas personalidades de los protagonistas salen a relucir, junto con la acción de la trama y los planos generales de la ciudad como cómplice de sus fechorías la convierten desde su inicio en una serie apetecible. Los superhéroes con los que el espectador rápidamente empatizará y una puesta en escena cuidada con el juego de colores de las secuencias y el rápido desarrollo de la trama es lo que hace que The Umbrella Academy sea una serie fácil de ver e interesante —a pesar de tener algunos episodios un tanto flojos que producen más incógnitas que revelaciones—.

Uno de los puntos fuertes de The Umbrella Academy es su banda sonora, compuesta por una serie de canciones pop que funcionan a la perfección para suavizar o alegrar secuencias de la serie más violentas o aburridas. The Kinks, The Doors, The Yardbirds, Nina Simone, Etta James, The Hollies, Noel Gallagher o Toploader son algunos de los artistas que se dejan caer por esta serie de entretenimiento que sin duda, es una buena recomendación para desconectar del mundo real y disfrutar de esos mundos de ficción en los que la acción y lo fantástico reinan a su manera.


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