Aquellos que traducen al español los títulos de las películas y series extranjeras en España han vuelto a hacerlo, por lo que es importante aclarar para que no confundamos dos producciones con un título prácticamente idéntico. Por un lado, la maravillosa serie de televisión Esto te va a doler (This is Going to Hurt, Lucy Forbes & Tom Kingsley, 2022) que narra la vida de un médico con poca experiencia laboral que no deja de aprender y poner en práctica sus conocimientos con todos los distintos casos que tiene que atender en su día a día dentro de una sala de partos —leer reseña pinchando aquí—, y por otro lado, la película Esto va a doler (Fingernails, Christos Nikou, 2023), que cuenta la historia de una joven que no cree que la relación duradera que tiene con su pareja esté funcionando, pese a un avance tecnológico que confirma lo contrario.
El filme, llamado en su versión original Fingernails, describe la vida de una mujer que se encuentra buscando trabajo como profesora pero encuentra una oportunidad laboral en el Instituto del Amor, una empresa que certifica si una pareja está enamorada o no. La joven decide empezar a trabajar en un trabajo distinto para comprender mejor cómo funciona. A través de actividades o sesiones junto a monitores en los que les plantean ejercicios que la sociedad considera románticos para poner a prueba sus sentimientos, y una prueba final que determinará mediante el uso de la tecnología cuál es el resultado de los sentimientos de esa pareja, la cinta aborda el poder que se le confía a una máquina para afirmar o negar si hay amor en otros, como si el amor fuera una enfermedad que pudiera analizarse a través de una parte de nuestro cuerpo (las uñas, en este caso).
El ritmo demoledor que tiene la película termina de derrumbar este drama romántico que respira mucho cine independiente en su historia y en la forma en la que se describe, y lo mezcla con unos toques de ciencia ficción, otorgando así demasiada responsabilidad a la tecnología en una época en la que depositamos más tiempo del necesario empleando las máquinas que nos rodean. Esto va a doler posee buenas interpretaciones del trío protagonista que encabezan Jessie Buckley, Jeremy Allen White y Riz Ahmed, pero estas no son suficientes para atrapar al espectador en una película que no es capaz de convencer ni en su planteamiento ni en la evolución de su narración.
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