El documental Ciutat morta (Ciudad muerta, Xavier Artigas & Xapo Ortega, 2014) relata el proceso de investigación que hay detrás del caso conocido como 4F, en el que varias personas fueron detenidas la noche del cuatro de febrero de 2006 en Barcelona. Después, fueron condenadas y llevadas a prisión, acusadas de ser las causantes del grave accidente que sufrió esa noche un guardia urbano que le dejó en estado vegetativo.
Esta investigación destapa un caso de corrupción policial, política y mediática que demuestra que se culpabilizaron a personas inocentes de unos delitos que no cometieron. Ciutat morta comienza con la reunión de una multitud de personas en Barcelona para ver este reportaje en un cine que llevaba años cerrado pero que desde ese día pasan a llamar cine Patricia Heras. Este documental indaga en los hechos que se sucedieron, escucha las declaraciones de las víctimas y de sus familiares ,y contacta con expertos en la materia para saber más sobre los sucesos que tuvieron lugar esa noche y la implicación legal de todo lo que sucedió desde entonces.
Voces que revelan una injusticia social
Con los testimonios de algunas de las víctimas que se han atrevido a rememorar esos trágicos momentos vividos así como de amigos y familiares de ellos, abogados defensores, periodistas, trabajadores de organizaciones de derechos humanos, médicos forenses, antropólogos o miembros de la coordinadora catalana para la prevención de la tortura se desarrolla una historia de injusticia social que demuestra que el sistema judicial falla.
Dividida en nueve capítulos que se mueven entre conceptos como la venganza, la tortura o el racismo, Ciutat morta posee una estructura subjetiva con la que se explica un suceso escandaloso que ha terminado castigando a personas inocentes por no llegar a averiguar al verdadero culpable de un accidente nefasto. Esto ha rebelado la vergüenza de todo un sistema que ha continuado la condena innecesaria volcada solamente en un número de personas escogidas al azar pero con unos rasgos físicos que compartían todos ellos. Y es que, de no haber encontrado «culpables», el ayuntamiento de Barcelona hubiera sido el responsable del accidente del guardia urbano.
Periodismo de investigación y compromiso social
Ciutat morta es un ejemplo de periodismo de investigación en el que se buscan respuestas a un problema evidente que existe en la sociedad y que pone en evidencia un sistema con el que hay muchas personas implicadas que han accedido a culpabilizar a personas inocentes por no tener al verdadero culpable y no querer que una institución política corriera con las consecuencias del accidente que tuvo lugar hace casi veinte años.
El documental denuncia vulneraciones muy graves y lo hace trabajando en terreno conflictivo con muchos implicados que no quieren que investigaciones así salgan a la luz. Esta investigación documental quiere transformar la situación actual y por utópico que parezca, ayudar a crear una sociedad y un mundo mejor, y lo hace a través de la denuncia de unos hechos inconcebibles con los que, a pesar de que cueste aceptar la realidad, la injusticia está ahí y no podemos mirar a otro lado.
«No existe peor tiranía que la ejercida a la sombra de la ley con apariencia de justicia» – Montesquieu
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