Tras una primera temporada en la que nos adentrábamos en las vidas de un grupo de policías asentados en Madrid que luchaban contra el terrorismo yihadista que nos permitió conocer más a quienes estaban detrás de esa violencia y a quienes luchaban por frenarla, La Unidad (Dani de la Torre & Alberto Marini, 2020) vuelve con una segunda temporada que repite las claves del éxito de su primera dejando un thriller repleto de adrenalina e intriga. Comenzando con una secuencia de acción que imita al inicio de su estreno como serie, esta segunda temporada nos va dando una de cal y otra de arena para que el espectador sepa que esos momentos de felicidad tienden a traer una consecuencia negativa.

Las consecuencias de los conflictos violentos y bélicos en los seres humanos son las que continúan promocionando el terrorismo y las muertes y hacen del ser humano una especie tan salvaje como para ser capaz de matarse entre sí por intereses personales y rencores. Así vemos en La Unidad cómo la venganza y el honor son los motivos que mueven a los bandos a justificar sus asesinatos y los intereses económicos de mucha gente estarán en juego en medio de todas estas muertes.

En esta segunda parte, entraremos en la casa de un importante jeque árabe que convive con varias mujeres y sus respectivos hijos al sur de España y como espectadores haremos un juicio moral de esta situación que tan dura se plantea para las mujeres que son poseídas como objetos y usadas al antojo de su marido. La falta de libertad de ellas nos adentrará en otro thriller que también producirá pavor y miedo a partes iguales.

Una imagen de la serie ‘La Unidad’

El guión y las interpretaciones del elenco es lo que convierte de nuevo a La Unidad en una serie que nos da la oportunidad de conocer aquello que la mayoría de nosotros desconocemos, no sólo de las vidas de estos polícias sino también de las personas que se convierten en terroristas. Aunque la serie define dos bandos claros cuando la realidad nos dice que no hay blancos y negros sino muchos grises que son determinantes en que la violencia y terrorismo existan, como serie de ficción, en esta segunda temporada seguiremos conociendo una parte de las vidas personales de algunos de sus protagonistas a pesar de que se le da más importancia a la acción y tensión que aporta el thriller policiaco, al que se le presta una especial atención con un cierre de temporada que nos removerá por dentro.